Sentirse Bien con Terapias que Relajan

   Las agresiones del medio nos obligan a hacer un alto en la vorágine del día a día, para entregarnos a un momento de relax y retomar fuerzas.

Estas prácticas ayudan a recuperar el bienestar perdido, sobre todo si la tomamos en forma continua. Un mimo que nos debemos hacer para mejorar nuestra calidad de vida.

• Masaje Shiatsu - Digitopresión

   Es una técnica de masaje manual basado en la acupuntura pero sin utilizar agujas.

Ayuda a relajar los músculos, dolores articulares, inflamaciones, migrañas, insomnio, etc.

Contribuye a la apertura de canales de energía, meridianos del cuerpo. Al abrir estos canales se balancea la energía que fluye libremente aliviando así trastornos físicos y emocionales.

• Reflexología

   Es una técnica de la Medicina Tradicional China, por lo tanto se basa en el flujo de la energía a través de los meridianos. Cada parte del cuerpo, cada órgano, cada víscera, están representados y relacionados con una parte del pie. Durante este masaje profundo, el terapeuta aplica presiones en puntos concretos en el pie, usando las yemas de los dedos.

Estamos muy acostumbrados a relacionar únicamente a la Reflexología con los pies, pero esto es sólo una parte del cuerpo que refleja el todo. Ésta técnica también es utilizada en las manos (acropresión o acropuntura), en la nariz (rinopuntura), cráneo... Y lo más conocido en estos últimos tiempos, la Auriculopresión- Auriculopuntura- Reflexología en oreja.

• Masajes con Piedras Calientes

   Combinar piedras calientes y frias para la práctica del masaje es una eficaz técnica de los indios americanos, que ayuda a combatir los dolores crónicos (artrosis- artritis) y previene las contracturas musculares.

Las piedras actuan a dos niveles:

1. de manera estática: realizando presiones terapéuticas en zonas concretas
2. de manera dinámica: realizando masaje sobre el cuerpo, deslizándolas suavemente, matizando la intensidad

Un masaje con piedras incita a conectarnos con los sentidos, aún los más sutiles.

Vivenciar una sesión con piedras es un momento para disfrutar.

Terapia de la Polaridad

   La Terapia de la Polaridad es un sistema que apunta a reestructurar el equilibrio energético del cuerpo y la mente.

Utiliza un sistema de técnicas corporales de contacto manual para el balanceo energético, una dieta para purificar el organismo y fortalecer la salud, un sistema de ejercicios terapéuticos (Yoga de la Polaridad) y una tarea de autoconocimiento que incorpora cuerpo-mente-espíritu.

Esta terapia reconoce la energía vital que rodea y anima a todo ser como el centro focal de la salud. 

   El término "polaridad" se refiere a la pulsación universal de expansión-contracción, conocido como Ying-Yang en las terapias orientales. La energía pulsa en corrientes bipolares que rodean y penetran el cuerpo en una danza dinámica tridimensional.

El terapeuta utiliza la conexión entre sus dos manos como transmisor para rebalancear las cargas bipolares y recargar el nivel general de energía en el cuerpo del paciente.

Su marco teórico deriva en gran medida de las antiguas prácticas de sanación indias, conocidas como Ayurveda.

En una sesión típica de Terapia de la Polaridad el terapeuta evalúa el estado energético mediante la observación, la palpación y el diálogo. No es necesario que el paciente se quite la ropa y no se utilizan aceites ni lociones. 

El terapeuta aplica un contacto físico directo. El mismo puede ser suave, mediano o firme con movimientos hamacados y vibracionales, para equilibrar y amplificar el flujo energético en el paciente.

   Durante la sesión, el terapeuta le brinda al paciente la posibilidad de incrementar su conciencia y percepción de las sensaciones energéticas sutiles, que a menudo se experimentan como cosquilleo, calor, expansión o movimiento ondular. Luego del trabajo manual, el terapeuta puede recomendar ejercicios corporales y respiratorios para elongar y equilibrar el cuerpo.

Los resultados de las sesiones de la Terapia de Polaridad varían desde una profunda relajación, a nuevas comprensiones sobre patrones energéticos y sus implicancias, hasta la liberación de numerosas situaciones problemáticas específicas que afectaban la salud del paciente.

Reflexología

   La Reflexología es una terapia natural que se basa en el estímulo de las áreas reflejos de los pies y de las manos.

   En su visión, los pies y las manos son microsistemas de la totalidad del cuerpo. Todas las partes del cuerpo, órganos, visceras y glándulas, están asociadas con áreas específicas llamadas Zonas Reflejos, con las cuales se hallan conectadas por una circulación energética.Estas zonas reflejan tanto el aspecto físico como el psíquico-emocional de la persona y dan cuenta además de su estado energético. 

   Esta terapia cuenta con mapas de pies y manos para la localización de las áreas reflejos y posee su propia forma de diagnosis, una particular organización y seguimiento de los tratamientos y técnicas de estimulación específicas, que la diferencian de otros métodos terapéuticos y de cualquier forma de masaje.

   Una sesión de Reflexología dura aproximadamente entre 40 y 60 minutos, el paciente permanece vestido excepto por su calzado y sus medias. El tratamiento es No Invasivo. El reflexólogo utiliza sus manos para estimular las áreas. Dicho estímulo en esta zona afecta a un órgano o área, liberando tensiones, dolores y congestiones e induce a una profunda relajación y a un mejoramiento de la circulación.

Masaje Californiano

   El Masaje Californiano es una forma de trabajo corporal que evoluciona continuamente como forma de arte curativo. Es conocido por la sensación de integridad psiquica, física y espiritual, la paz y la vivacidad que brinda a quien lo recibe.

   

   Puede ser caracterizado por su énfasis en los movimientos largos, fluídos e integradores que sirven de base para la incorporación de diversas técnicas y métodos.

Desde el punto de vista técnico, el masaje californiano aplica un sistema científico, de actividad a la estructura de tejidos blandos del cuerpo humano por medio de una variedad de movimientos. Estos se realizan principalmente con las manos, antebrazos y codos, utilizando aceites que facilitan la fluidez. 

   Es aquí, en la calidad del contacto expresado a través de la suavidad y sensitividad de las manos, en la respiración (paciente), en la fluidez del movimiento terapeutico, que nos recuerda a su maestro de Tai Chi, y en la quietud de la mente meditativa donde ésta técnica se transforma en arte y se expande para incorporar elementos de tradiciones milenarias. 

  Este trabajo es integrado con conocimientos de aromoterapia, balanceo energético, modulación del sonido, respiración conciente y cuencos.

Masaje Energético Profundo y Armonizador

  La palabra masaje significa "compartir el tacto", pero el trabajo va más allá de la piel, los músculos y los huesos.

  Un buen masaje llega a lo más profundo de nuestro ser y nos conecta con nuestra esencia, con nuestra fuerza vital, con el "todo" que es algo más que la suma de las partes.

Quien recibe el masaje es un "ser activo" en este proceso de autoconocimiento y entrena su percepción tomando conciencia de su propio cuerpo, registrando posibilidades y dificultades.

  La respuesta que buscamos en el Masaje Energético es la "relajación y la expansión".

La misma relajación que posibilita nuestros estiramientos es la que nos permite una mayor flexibilidad en las articulaciones y una reducción de la tensión muscular.

El contacto nos lleva a convertir la rigidez en flexibilidad, la incomodidad en placer y el malestar en confianza y bienestar.

  La respiración, las posturas, el contacto y el movimiento nos permiten soltar tensiones e incomodidades, conectarnos con nuestras sensaciones, sentimientos y potencialidades,  enriquecidas.

  En este proceso de "Integración Funcional" entre cada una de las partes del cuerpo podemos transformar hábitos crónicos y lograr un profundo cambio en nuestra postura.

Masajes

   Nuestro cuerpo recuerda, siente, atesora y habla...

 El movimiento es la esencia de la vida; cada pensamiento, cada sentimiento, cada emoción, encuentra su expresión en el cuerpo.

 El trabajo bioenergético nos ayuda para abrir las puertas a nuestro mundo interno, en un tiempo propio e individual donde podamos descubrir procesos y generar cambios que comprometan a todo nuestro ser: Mente- Cuerpo- Sentimiento.

  El objetivo del trabajo bioenergético es restablecer el equilibrio Mente-Cuerpo-Energía, vivenciar nuestro propio cuerpo buscando el equilibrio entre el tono muscular y la postura más funcional, armonizando así el tono muscular-tono emocional.

Al acrecentar la flexibilidad articular y la elongación muscular, se logra con menor esfuerzo mayores posibilidades de movimiento.

Movilizar las corazas musculares, devolviendole al cuerpo el libre fluir de las corrientes energéticas, aumenta la vitalidad y con ella la creatividad.

   El trabajo del masaje en movimiento, manteniendonos en un estado de "presencia continua", nos hace sentir la totalidad de la unidad corporal: esqueleto-articulaciones-miembros-tronco y cabeza, armonizando unos con otros y facilitando así posiciones y desplazamientos tal vez desconocidos por nosotros mismos hasta ese momento.